La nostalgia abunda y la letra de una canción de este disco nos alimenta de placer y energía. Esta en vida como cuando en vivo fue cantada por este genial artista que logró meterse de lleno en el corazón de los pueblos latinoamericanos.
Esa entrada del tema no se puede olvidar. Piano del maestro, un cappella multitudinario de un público encendido y de nuevo el protagonista principal.
“Yo no busco lo que vos tenés, yo no quiero hacerte ningún test. Sigo siendo un gato en la ciudad, dame una oportunidad. Tengo a un ruso y a un yanqui dentro de mi habitación, que se juegan mis zapatos y mi foto de graduación, en un Atari.
Son las cuatro y no puedo dormir, salgo a la calle a pelear por mí, sólo me muevo bien y la noche me tomó por rehén. Alguien tira para abajo, yo me trato de zafar, alguien que grita "es de los nuestros", alguien que lo va a buscar.
Pero venga lo que venga, para bien o mal, tirá, tirá para arriba, tirá.
Si no ves la salida, no importa, mi amor, no importa, vos, tirá. Tirá, tirá para arriba, tirá. No hay horas perdidas, no aflojes mi amor, no aflojes, voz tira..."
Un himno de uno de los más grandes del rock argentino.
Hemos sido fieles seguidores de su extensa carrera. Es de las pocas leyendas vivientes que aún sigue en los estudios y en los escenarios.
La maestría se nota en sus discos, sus melodías y sus composiciones. La fuerza que le impone a cada uno de sus temas lo hacen realmente insuperable.
Por eso siempre recalco de que si existiría una maquina del tiempo, fijo que escogería y me quedaría a vivir para siempre en la década de 1980 para gozar de tanta buena música, porque ese fue el tiempo superlativo del rock en nuestro idioma.
MIGUEL MATEOS tiene gran parte de culpa de que así sea.
En febrero de 1981 llega Queen con Freddy Mercury al Estadio de Vélez para brindar 3 mega-recitales y ZAS sería el grupo de soporte. A pesar de que era un grupo desconocido, realizaron un show muy profesional por el cual recibieron algunos reconocimientos y se les abrirían muchas puertas.
El debut discográfico de la banda se daría en 1982 cuando lanzaron el álbum “Zas” para el sello Music Hall. Este disco se caracterizó por tener un sonido muy prolijo, del cual el tema más recordado es “Va por vos, para vos”, todo un éxito tiempo después.
Siendo todavía algo desconocidos participan de una serie de conciertos junto a nuevos artistas. En un momento dado el productor Oscar López propone con buena visión que el grupo deje de llamarse Zas para empezar a denominarse Miguel Mateos y Zas.
Luego de cambios en su formación y en pleno fin de la dictadura, Miguel Mateos y Zas aparecen en 1983 con el LP “Huevos”, el cual marcaría el inicio de sus éxitos.
Si uno revisa y escucha los temas, rápidamente nos damos cuenta de que la libertad y la libre expresión hicieron su parte cuando diversos músicos encararon crudamente lo que se vivía por aquel momento en tierras guachas.
Así, canciones como “Huevos”, “Un poco de satisfacción”, “Extra, extra”, “Mujer sin ley”, “En la cocina”, “Exilio en Paris” y “Su, me robaste todo”, se convierten en hits rotundos en su país de origen.
Fue la primera manifestación de Mateos en democracia y por lo tanto su disco se resume algo asi como fruto del descontento por el pasado, la transición del presente y la esperanza de un futuro mejor.
"Un poco de satisfaccion"
"Extra, extra"
El vendaval de rock se veía venir cuando lanzaron al mercado su tercer LP titulado “Tengo que parar”, apoyado en el impecable trabajo de los integrantes del grupo.
De aquí saldría el grandísimo tema que mencionamos en la introducción. Y al igual que muchos no tengo dudas de que “Tira para arriba” es la canción con la que se le reconoce a Miguel Mateos cuando se le nombra.
Un temón de principio a fin, de esos que quisieras no acabe nunca.
"Tira para arriba" en vivo hace 27 calendarios.
"Tira para arriba" (Vivo version stereo)
"Tira para arriba" (version de studio)
A la par, los hits “Ana la dulce” y la misma “Tengo que parar” sacuden el espectro musical y colocan a Mateos en la cúspide de su entonces corta carrera.
1985 significó el momento cumbre de Miguel Mateos y Zas, cuando graban su primer álbum en vivo “Rockas Vivas”. Este trabajo fue extraído de sus presentaciones en el Teatro Coliseo de Argentina, con ocasión de presentar su LP anterior.
Desde que salió a la venta arrasó con una demanda formidable, convirtiéndose por aquel tiempo en el álbum más vendedor del rock argentino de todos los tiempos, junto a “El amor después del amor” de Fito Paez.
El tema “Tirá para arriba” se convierte en un himno, pero también se destaca “Perdiendo el control”. Como dato curioso, la tapa del mismo mostraba a un Miguel Mateos sosteniendo la guitarra como zurdo, cuando en realidad solo se trató de quizás un error del mismo diseñador al invertir la foto original.
Los conciertos que siguieron fueron apoteósicos y superaron toda expectativa.
Y hasta hoy la gente sigue pidiendo el largo intro de “Tirá para arriba”. Sensacional.
En febrero de 1986 Miguel Mateos graba un Maxi-Single, “Mensajes en la radio” con 2 canciones. Originalmente salió en disco de vinilo: Lado A: “Peleando por tu amor” y Lado B: “Mensajes en la radio“. Mateos busca darle otra dirección a la banda, haciendo que el sonido se acerque al estilo de Bruce Springsteen.
No olvido que fue este año que vi en vivo a Miguel Mateos y Zas en la desaparecida y extranada Feria del Hogar de Lima.
No existían las cámaras fotográficas de hoy con sus diversos megapíxeles y su sistema de videos. Los teléfonos celulares apenas eran exclusividad de países como Japón y Estados Unidos. Es decir, era casi nula la manera de registrar un concierto.
Por eso, el único recuerdo que poseo es lo que me quedó en la mente y en el corazón. Harto rock and roll y un artista allá arriba tocando con la fuerza de los grandes.
La Feria del Hogar era como un parque de diversiones al estilo Disney -no por el glamour, pero si por el tamaño y la diversidad de cosas que podíamos encontrar dentro- donde ingresabas al mediodía y salías hasta casi la medianoche.
Encontrabas juegos mecánicos, fast food, discotecas, tiendas de artefactos, decoración, artesanía, libros, ropa y lo principal era el final donde se producían conciertos masivos con artistas del momento en sus diversos géneros.
Y perdonen si les hago un recuento de estos últimos párrafos personales, pero era necesario para describir el lugar donde gocé a Miguel Mateos y Zas.
Tener entrada a la Feria te daba acceso al ingreso, ver de todo y de paso disfrutabas del Gran Estelar. Fui porque iba todos los años, pero a decir verdad no lo hice exactamente por ver a Mateos. Fue parte del paseo y por eso siempre digo que mi primer concierto -con ticket exclusivo para tal evento- fue cuando vi a Soda Stereo en el mismo calendario pero en Noviembre.
Pero vaya que me impresionó y pasé a ser un fanático mas de la banda.
Así tras exitosos conciertos en Perú y en Chile, preparan en New York y lanzan al mercado el álbum “Solos en America”. El disco mostró la gran evolución de la banda y un sonido diferente que le valió ser la llave para la conquista del publico latino.
Los grandes éxitos de este lanzamiento pasan por “Cuando seas grande”, “Es tan fácil romper un corazón”, “Llámame si me necesitas”, “Mi sombra en la pared” y la canción que lleva el mismo titulo del disco.
Después de esto, Miguel Mateos y Zas ya eran reconocidos en toda Latinoamérica, haciendo énfasis que un país tan nacionalista como México lo incluiría entre sus preferidos en el mundo de la música.
Por cierto, en 1987 realizarían una extensa gira por diferentes ciudades mexicanas y tras su éxito rotundo la prensa local no dudaría en colocarle a Mateos el apelativo de “El Jefe del Rock en Español”.
“Atado a un sentimiento” es el ultimo álbum del cantante argentino pegado a la banda Zas. Todos sabíamos que Miguel no solo era un líder y la cara visible de un grupo, era mucho mas que eso y lo de Zas solo fue un agregado.
De este LP sobresalen “Atado a un sentimiento” y “No me dejes caer”.
La ‘misteriosa’ falta de oportunidades en su país (época de Menem), fue la causa que lo lleva a disolver la agrupación Zas. Después, Miguel anclaría en Los Angeles para iniciar una nueva etapa como solista.
Así, a partir de 1990, el gran Miguel Mateos inicia su aventura como solista, empezando con el disco “Obsesión” para el sello BMG. El mismo fue producido por Michael Sembello, el músico estadounidense que ya había trabajado con reconocidos artistas y fue parte del soundtrack de la película “Flashdance” con su tema “Maniac”.
En 1992 saca “Kryptonita”, un álbum que significa su vuelta a las guitarras y las secciones de cuerda. Hits: “Lola”, “Si tuviéramos alas” y “Hablando con mi ángel”.
Los conciertos brindados durante el Obsesión Tour y el Kryptonita Tour fueron grabados y compilados en el álbum Cóctel que vio la luz en 1993.
En 1996 edita su disco “Pisanlov” (Peace and love o Paz y amor). Muchos de los seguidores consideran este lanzamiento como uno de los mejores de su carrera, aunque curiosamente fue editado en todo el mundo con excepción de Argentina que atravesaba una seria crisis económica.
Sus letras tienen alto contenido social y eso lo podemos escuchar en temas como “Locomundo”, “Los argentinitos” o “Cortar hasta el hueso”.
La evolución de Mateos se hace notoria con la puesta en circulación de su disco “Bar Imperio” grabado en 1998.
El espectro musical abarcado es muy amplio, con canciones tan diferentes como “Panorama“ o “Besa al tonto”,
Después de escucharlo varias veces hay que admitir que este disco es otro avance en la continua evolución de este artista. Desde el rock simple pegadizo de “Encuentra un lugar” hasta la sentida balada “Crac” delinean un trabajo de gran altura.
Ya en el nuevo siglo, saca cuatro disco mas, “Salir Vivo” (2002), “Uno” (2005), “Fidelidad” (2008) y “Primera Fila” (en vivo 2011).
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A los 58 años de edad, Miguel Mateos continua vigente, con ganas de seguir produciendo discos (ya se cuentan 17 en su carrera) y brindando sus alabados conciertos por el mundo.
Destacamos que es uno de los mejores artistas de los inicios del movimiento rockero en nuestro idioma de la década de 1980. Sus letras y el grandioso rock and roll que siempre nos ha ofrecido lo elevan a ese podio.
No puedo olvidar aquellos sábados de mi juventud, reunido con amigos, en fiestas, paseos o simplemente en la esquina del barrio. Escucharlo siempre fue un tiempo feliz.
MAESTRO, gracias por tan buena música!